Las cuerdas de guitarra pueden romperse y se rompe por cualquiera de las siguientes razones:
- Exceso de tensión en la cuerda las cuerdas de guitarra están diseñadas para una afinación de concierto. Pueden tensarse algo más en riesgo de que se rompan pero un exceso de tensión puede hacer que se rompan o que deformen o dañen el mástil de la guitarra.
- Cuanto más viejas de una cuerda tanto más probable será que se rompa. La disminución en su elasticidad junto con el sudor de los dedos debilita las cuerdas y con el tiempo puede hacer que se rompan.
- Las cuerdas se rompen a menudo por la acción de la mano derecha especialmente en los rasgueos violentos. Esto puede hacer que la cuerda se rompa en cualquier punto de su longitud mientras que la mayor parte de las guitarras solistas rara vez rompe una cuerda, algunas guitarras rítmicas, especialmente los que tocan con dureza la rompen constantemente.
- Un doblez en una cuerda puede producir un punto débil. Antes de romperse se puede ver y palpar como un pequeño bulto al poner las cuerdas hay que tener cuidado de no doblar las ya que es esto lo que produce este tipo de roturas.
- La existencia de bordes cortantes en cualquiera de los puntos de apoyo de las cuerdas puede hacer que se rompan. Tras comprobar el lugar donde se ha roto la cuerda conviene limar esas superficies.
Cómo aumentar la duración de las cuerdas
Las cuerdas se dan de sí a lo largo de su vida útil. Van perdiendo elasticidad y su calidad tonal disminuye. Con el tiempo ya no pueden dar más de sí las cuerdas viejas producen notas que carecen de riqueza en armónicos como resultado las guitarras resultan más difícil de afinar y su sonido es apagado y carente de vida.
Las cuerdas también se desgastan, en especial en los puntos en los que entran en contacto con los trastes. Las cuerdas entorchadas son las que más sufren acaban presentando "puntos de desgaste" en los que la parte inferior del entorchado queda lisa. Esto y la rotura del o entorchado produce alteración en la calidad tonal, y además la rotura de los entorchados produce un "zumbido" de las cuerdas. Con el tiempo las cuerdas quedan opacas sucias y oxidadas la suciedad y la grasa producida por el sudor de las manos se acumulan rápidamente sobre las cuerdas, especialmente en su cara inferior y en los huecos del entorchado. Por este motivo deben secarse y limpiarse las cuerdas inmediatamente después de tocar.
"Pellizcar" las cuerdas es un truco de los profesionales que, en ocasiones, permite eliminar la suciedad de debajo de las cuerdas. Una por una, se tira de las cuerdas dejando después que golpeen contra el mástil. Repetir este procedimiento unas cuantas veces con cada cuerda.
"Cocer" las cuerdas es un truco de afinado que ocasionalmente, utilizan los profesionales empobrecidos. Consiste en cocer las cuerdas viejas en agua durante algunos minutos para eliminar la grasa y la suciedad. Aunque así jamás se conseguirá que las cuerdas suenen como si fueran nuevas, hay quien dice que consigue un tono algo más brillante.
La duración de un juego de cuerdas depende de varios factores. Un guitarrista que trabaje 4 horas por noche, 6 noches por semana, en un club caluroso y lleno de humo, gastará mucho más juegos de Cuerda que hubo uno que interprete una pieza de 20 minutos en una fiesta un par de veces al año. Cuanto más se sube menos durarán las cuerdas. Lo mismo se aplica si se toca con mucha dureza.
La frecuencia con la que hay que cambiar las cuerdas depende también de cada uno. Algunos guitarristas profesionales utilizan un juego nuevo para cada actuación. Muchos aficionados, por otra parte, deja el mismo juego en la guitarra durante años, y consideran sustitución una circunstancia excepcional e innecesaria.
Muchas personas disfrutan con el brillante sonido de las cuerdas recién puestas. Por el contrario, la mayor parte de los guitarristas experimentados prefieren el sonido ligeramente menos "colorista" que se obtiene después de tocar una o dos horas.
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