Todos los años arrancamos desde el mes de Septiembre hasta mediados de Noviembre el tour que denominé, desde el 2014, "La Guitarra Sin Límites". En un principio se llama "La guitarra no tiene límites" pero por la sugerencia de un amigo que escribió un comentario en un post, me ayudó a cambiar de un "no" a un "sí". Y es así que año tras año he ido girando por diferentes partes del Perú con muchas anécdotas que las puedes revisar en este, mi blog; giras que están plagadas de anécdotas e historias muy graciosas, y algunas un poco trágicas. Este 2017 no estuvo exento de varias anécdotas que contaré en estos 5 capítulos.
Los previos
A partir del mes de Mayo siempre pongo publicidad en mis redes sociales y envío correos a todos aquellos interesados en mis clínicas, poco a poco voy recibiendo, no confirmaciones, pero mucha gente interesada: salas de ensayo, academias de música, productores e inclusive amigos y grupos de amigos que quieren tener mis clínicas en sus localidades. Del 100 % de correos, mensajes y comunicaciones, solo el 10 % son serios y un 1 % se llega a concretar.
En mis largos años de experiencia en la educación musical, uno como persona y profesor a la vez debe responder por igual y con el mismo entusiasmo a todo aquel que te pregunte por "¿cómo puedo hacer para que tu clínica esté en mi ciudad?". Si habrás visto mis comentarios en el YouTube, siempre respondo las inquietudes, preguntas y/o saludos de los suscriptores y aquí es lo mismo. En una historia que contaré más adelante, un joven músico me propuso la idea de hacer una clínica (y digo muy joven no solo por su edad sino por la poca experiencia que tenía) y esta se dio con gran éxito.
Hay algo que me queda en claro en todas mis clínicas (antes, durante y después),que nuestra visión como profesor debe aceptar bajos ciertos requerimientos toda pregunta e iniciativa y entender que no hay nadie pequeño ni grande para los proyectos educativos y artísticos que se quieren llevar a cualquier localidad. Y si tú que estás leyendo esto gustas llevar un emprendimiento educativo en el lugar donde estés, si el profesor o maestro no es cortés, educado y formal, o tiene pintas de soberbia, mejor no lo contactes. No digo yo que tenga estas facultades de humildad pero sí tengo a ciencia cierta la capacidad de discernir cuando un profesor te puede dejar algo en una actividad de carácter pedagógico.
Estas son las premisas básicas para poder entender el éxito de una gira y un tour de clínicas, como músico y profesor, ser educado y respetuoso, y por el lado de aquellos que te llevan, entender las exigencias y requerimientos del profesor o maestro... Así tendremos una excelente clínica.
Preparación
En todos los tours los músicos deben estar bien preparados porque las exigencias físicas son muy intensas. Viajar muchas horas en bus, en avión, el dictado de clases, clínicas, tocar en vivo, hacer pruebas de sonido, diferentes tipos de clima, altura, mala alimentación, etc., te puede pasar la factura en la misma gira o después. El año pasado, después de terminar mi tour de clínicas, me dio una apendicitis, y este año no fue la excepción. Por lo tanto, para aquellos que hacen giras a mediana escala siempre existirán muchas recomendaciones como las siguientes:
1. Tratar de dormir lo más que puedas.
2. No consumir gaseosas ni refrescos, preferible solo agua.
3. Saber desde anticipado las temperaturas y alturas de los lugares que visitarás. Esto hará que prepares las diferentes modificaciones en tu vestimenta y alimentación.
4. Prepararse físicamente por lo menos dos meses antes.
5. Llevar al pie de la letra tu agenda y no aceptar otros compromisos que harán tu tiempo más estrecho y limitado.
6. Siempre exigir un hotel cerca al lugar donde tocarás, así mismo, saber los lugares de emergencia (hospital y estación de policías).
Todo esto te dará la garantía de tu seguridad y salud, claro está descartado el tema económico y toda la producción del espectáculo que realizarás (pago de honorarios, pago de hotel, pago de viáticos, ride de equipos).
¿Qué equipos llevaré?
Normalmente viajo con la Gringa, mi Fender Custom Shop 2013, un usb con mis pistas (en mi celular también las llevo) y mi procesador Helix line6. Aparte, cuerdas de repuesto, púas, cables y la ropa que usaré para la clínica o masterclass... Ah, y me olvidaba, mis DVDs, el merchandising Fender y mucho entusiasmo por conocer a nuevos amigos. Es gracioso porque si bien es algo educativo, el dar una imagen y una primera impresión es clave para poder capturar la atención del público que con mucha expectativa se interesa por aprender o apreciar algo más que le pueda servir para tocar mejor la guitarra.
Por lo tanto, cuando viajo en avión llevo mi guitarra en la espalda dentro del estuche mono, el banner de Fender y una maleta grande donde meto todo: ropa, helix, accesorios, DVDs, etc. (aproximado, 19 kilos). La cuestión se complica cuando viajo en bus porque no puedo subir la guitarra, entonces tengo que llevar el hardcase (estuche duro) que sí verdaderamente pesa bastante.
Es entonces así, después de tanto ordenar, verificar fechas, conversar con los productores y emprendedores, ver todos los previos, que empezamos el tour de clínicas.
Primera fecha: Rumbo a Ayacucho...
Continuará.
We rock!